BANDA DE GUERRA JIM DEL LICEO VALENTÍN LETELIER CELEBRA VIGÉSIMO TERCER ANIVERSARIO.

Con un desayuno, el liceo Valentín Letelier, homenajeó a la Banda de Guerra en su vigésimo tercer aniversario, actividad que ya es una tradición desde el año 2013 en adelante.

En la oportunidad se destacaron los logros que ha tenido en su trayectoria y especialmente en esta última etapa, los cuales enorgullecen al establecimiento.

La directora, Isabel Rodríguez Pincheira, en un emotivo saludo señaló que: “para nosotros es motivo de orgullo estar festejando estos 23 años de vida, en la construcción de este largo camino que ha ido de menos a más; Cada uno de Uds. es muy importante para nosotros, ya que son los embajadores de nuestra colegio y de nuestra ciudad, gracias a sus presentaciones -en muchos caso- saben dónde queda Linares, puesto que nuestro país es tan lago muchos no nos ubican”

Para finalizar recalcó que “desde el año 2013 hemos ido mejorando la calidad de los equipos que utiliza la banda, los uniformes, la indumentaria, porque creemos que si vamos a hacer algo hay que hacerlo bien, por ello nos preocupamos para que cada acción sea hecha de manera que se asegure la comodidad y dignidad de quienes nos representan”

René Bernal, instructor y asesor de la banda, agradeció a cada uno de los integrantes y se refirió a este grupo especialmente como “la generación dorada” ya que los resultados que han obtenido han sido cada vez mejores, con más éxito, representado al liceo siempre entre los primeros lugares y eso nos llena de orgullo y -creo que también- a toda la comunidad; señaló además que las personas pasan, pero las instituciones quedan y les llamó a mantener en sus corazones el amor y el orgullo por esta institución que los ha formado”

Diego Ascencio, el Tambor Mayor, agradeció a la concurrencia – en nombre de los integrantes de la banda- , agradeció la oportunidad de pertenecer a esta institución, la cual “me ha dado los mejores años de mi vida y me ha formado en los valores del respeto, la disciplina. Agradezco especialmente a los instructores que me enseñaron a caminar… para después poder volar y me enseñaron que nada es imposible, con trabajo y esfuerzo”